El Estado no es un capricho de los marxistas, ni un invento de malvados que puede hacerse desaparecer con voluntarismo ó apelando a la conciencia humana.
El Estado es una construcción social históricamente determinada que surgió en un estadío particular de la evolución de la sociedad para dar solución a contradicciones concretas inexistentes hasta ese momento.
Cuando el escaso desarrollo de las fuerzas productivas mantenía a la humanidad como esclava de la naturaleza, cuando un duro invierno podía extinguir tribus enteras, no hacia falta el Estado. Los lideres surgían naturalmente por sus destrezas ó conocimientos, hasta el ultimo de los individuos de la tribu era necesario, las calamidades que ponían a prueba a la sociedad eran tantas y los medios para enfrenarlas eran tan pocos que todos debían colaborar en el fin común. Desde el niño que alcanzaba las piedras para lanzar a las presas hasta el anciano que sabía cuando y por donde pasarían los animales. El trabajo comunitario estaba forzado por el escaso desarrollo de las herramientas, de los medios de producción, y por lo tanto si todos eran necesarios para la reproducción de la vida, todos debían participar obligadamente de los frutos del trabajo. Y a nadie, por más fuerte que sea, se le ocurría apropiase de la parte de otro, ya que al día siguiente no tendría la indispensable colaboración de este. Además como los productos conseguidos nunca sobraban, era inexistente la lucha por la acumulación.
Con el inevitable desarrollo de las fuerzas productivas esto cambio. Por primera vez en la historia humana los individuos pudieron hacer frente a la naturaleza en grupos pequeños, y más importante aun: acumular. El desarrollo desigual entre estos grupos y en fin su capacidad de acumulación fue lo que dividió a la sociedad en clases apareciendo así los esclavistas, los esclavos de guerra y los esclavos por deudas. Así de la división natural del trabajo y de los lideres aceptados por sus cualidades que perdían su mandato al terminar la tarea para la que se le había elegido, se paso a la división social del trabajo y a la aparición de una clase domínate que se impuso no solo por la violencia sino por que tenían un rol histórico que cumplir, es decir que sus intereses particulares estaban en armonía con el desarrollo y la subsistencia de la humanidad. ¿Podrían haberse realizado las grandes obras de irrigación en la Mesopotamia antigua sin un régimen esclavista? ¿Que otro régimen podría haber enfrentado los retos que se le imponían a la humanidad en esa época con tan escaso desarrollo de los medios de producción? ¿Cual podría haber agrupado semejante cantidad de brazos en un objetivo común? Y no crean con esto que estoy haciendo apología del esclavismo, solo quiero que se entienda que todo modo de producción como sus correspondientes formas de Estado, mientras están en armonía con el desarrollo de la sociedad, nos guste o no, son un paso más, costoso y doloroso seguramente, en la evolución de la humanidad. Inclusive el tan odiado capitalismo es un paso en este sentido. Y aquí esta lo importante del marxismo que es reconocer el momento en que estos modos de producción y sus formas de Estado se convierten en un obstáculo y se generan las premisas para que sea remplazado, para seguir con el ejemplo anterior podemos decir que vemos como el régimen que logro organizar la sociedad para grandes obras que permitieron a la humanidad no someterse al imperio del clima con los canales de irrigación etc. se organiza ahora para agrupar brazos e inútiles esfuerzos para hacer las entupidas pirámides para enterrar a los sátrapas y faraones. Ese es el momento de barrer con todo. ¿pero que ponemos en su lugar? Los esclavistas dieron soluciones al los problemas de su época pero cuando las contradicciones de su modo de producción hicieron explotar el imperio romano apareció el feudalismo que reanimo la producción y el progreso, empezaron a desaparecer los esclavos y los siervos tomaron su lugar, estimulados ahora por la posibilidad de quedarse con más de su trabajo y solo dar un porcentaje a los señores, este modo de producción también colapsaría por no dar ya soluciones a los nuevos desafíos históricos y la lucha inevitable y heroica de los explotados, mientras una nueva forma de organización social aparecía y se mostraba como superadora: el capitalismo y con este nuevo modo de producción aparecería también la posibilidad de terminar con la explotación y el Estado ya que su extraordinario desarrollo de las fuerzas productivas permitirá liberar al hombre del trabajo alienado y construir la solidaridad ya no por la amenaza de la escasez, como en la comunidad primitiva, sino por la abundancia generada por un modo de producción que remplaza la explotación del hombre por la explotación de la maquina, idea genial gestada por hombres hace más de 150 años viendo apenas la maquina de vapor mientras hoy ya vemos los robots haciendo microchips.
¿Determinismo tecnológico dirán, ó dogmatismo economicista? pues yo lo que sé es que la solidaridad nacida sólo de la conciencia no dura mucho, y es solo para minorías. Los marxistas reconocemos la nobleza de los socialistas utópicos, y a las comunas anarquistas, pero sabemos que no pueden solucionar las contradicciones de todo un sistema social que como sea trajo hasta aquí a millones de seres. Son experiencias dignas de homenajes pero no puede pedírsele esto a toda la humanidad, y por eso se convierten en un estorbo cuando se las quiere imponer como la verdadera revolución. Donde falta el pan existirá la lucha por el pan irremediablemente, y con esto la especulación, la codicia y el “maldito Estado” hijo bastardo de las lucha de clases, las comunas libres que Kopotkim cree encontrar en el ocaso de la edad media no son más que los Burgos que estaban gestando a los capitalistas en los rincones de un mundo gobernado por un feudalismo en descomposición. Jesucristo también llamo a volver a las comunas a repartir las ovejas y cuidarse de los lobos, pero las bases materiales para esto no existían, la humanidad no estaba preparada para esto y ninguna sociedad se pone objetivos mayores a los que puede alcanzar.
Para los que no se preocupan en estudiar nuestros argumentos, los comunistas siempre serán los traidores contrarrevolucionarios. Pero allí donde han estado los comunistas siempre hicieron avazar la historia, sacaron a la mitad del mundo del oscurantismo feudal en el que estaba, derrotaron a la expresión más sanguinaria de los explotadores desde Berlín hasta las montañas chinas, siempre lucharon por las opciones más progresistas que estaban a mano, aunque más no sea conseguir un parlamento burgués para terminar con la monarquía. Seguramente esto no es revolucionario para muchos y verán como sacrilegio que apelemos hasta a la “guerra santa” ó el nacionalismo si con esto unimos fuerzas contra el imperialismo ó aceptemos los rituales ceremoniales de las tribus como hacia Ho chi Ming con tal de que se sumen a la guerra de guerrillas para liberar Viet Nam. Ojala el mundo entero tuviera acceso a la conciencia libertaria y nos liberara del sucio trabajo de hacer la revolución lidiando con problemas terrenales.
Hoy gracias a la labor de los comunistas y a pesar de la contrarrevolución la ex URSS y China están en mejores condiciones para que una revolución pueda tener la materia prima con la que construir un nuevo sistema superador del capitalismo. ¿Que seria hoy de estas enormes regiones si los comunistas no hubieran dado batalla? Seguramente otras dos Áfricas.