Fernando Samaniego, en "Las 'pintadas', un medio de comunicación altemativo. Pedro Sempere analiza: Los muros del posfranquismo", en El País, el 2 de marzo de 1977, escribió:La España de 1976-1977 ofrece la más fecunda producción de pintadas del mundo. A esta conclusión llega Pedro Sempere, autor de un análisis estructural del fenómeno de las pintadas: Los muros del posfranquismo, que se publicará en las próximas semanas, editado por Castellote. El libro, ilustrado con cuatrocientas fotografías, estudia las pintadas españolas desde una perspectiva histórica, técnica, estratégica, semiológica, ideológica y política.
Las
pintadas son una forma de comunicación alternativa y una de lasmayores prácticas espontáneas de los modernos períodos revolucionarios. Todavía no se ha publicado una teoría general de la pintada, en base a un análisis científico de este fenómeno social y político. En la escasa bibliografía sobre el tema aparecen un breve ensayo de Norman Mailey sobre el
pin americano y algunos libros con la reproducción textual de
pintadas, como
Les murs ont la parole o el reciente
Las pintadas del referéndum, con prólogo de
José Luis L. Aranguren, así como otrós publicados en Portugal. Pedro Sempere, especialista en temas de comunicación y
massmedia, ha publicado
La galaxia McLuhan,
Semiología del infortunio y
La década prodigiosa. Para simpatía o secuela de fenómenos exteriores sino como una forma de escribir
Los muros del posfranquismo ha rastreado, cámaras en mano, doce provincias españolas durante ocho meses en busca del testimonio gráfico y textual de la predemocracia en España. «A la muerte de Franco -declara Pedro Sempere a
El País-, la política española estalló en un heterodoxo
match a ocho bandas entre el Gobierno, la Oposición, la Monarquía, el Ejército, el franquismo, el terrorismo, la policía y la calle. En la calle, en los muros las
pintadas surgieron para decir lo que los medios informativos callaban, amordazados todavía por la resaca de la dictadura».
El libro arranca con unas amplias referencias a la producción revolucionaria de textos muralesmás recientes, que se inicia en el
mayo francés de 1968, para analizar después las diferentes caraterísticas de los
graffiti en Nueva York, Londres, Italia y Portugal.
Las
pintadas del posfranquismo tienen para el autor una perspectiva múltiple:
«Desde una perspectiva histórica o incluso arqueológica se buscan los restos de lo que fueron las
pintadas fascistas. En esta búsqueda de documentos gráficos he recorrido unas doce provincias, encontrando en Salamanca la
pintada hecha con plantilla del Franco victorioso con casco de guerrero, y en Valencia, también con plantilla, unos restos muy deteriorado del rostro de José Antonio. Las plantillas es un invento del fascismo, que siempre ha amado los símbolos.»
«En una dimensión comunicativa, las
pintadas no nacieron por comunicación alternativa para grupos y opciones ideológicas, sin acceso a los grandes medios informativos institucionales». En cuanto al carácter semiológico, análisis del proceso de emisión de las
pintadas, las transformaciones más usuales son: la tachadura la transparencia la réplica o contrapintada y, lo que podría definirse como
apropiación publicitaria.
Contenido dialéctico«La dimensión-estrictamente política e ideológica se estudia a través de un análisis de contenido eminentemente dialéctico. Las
pintadas del primer año del posfranquismo -desde la muerte de Franco hasta la celebración del primer 20 N- se caracterizan por su fácil clasificación en torno al hipotético centro del Gobierno, a cuyos flancos y a cuyo acecho se extendieron las dos oposiciones al proyecto reformista. Este proceso dialéctico lo estudió a través de un análisis lingüístico de los textos de las
pintadas de derecha e izquierda, de ultraderecha y ultraizquierda. A través de la frecuencia de ciertas palabras claves, escalas semánticas, porcentaje de siglas longitud de los textos. frecuencia de firmas o anonimatos, elaboración o crudeza sintáctica, se obtiene una perspectiva inédita y cuantificable de esa especie de
parlamento en la pared que se convirtieron los muros de España a falta de una democracia en la información».
Algunos datos desde esta perspectiva: sobre la base de mil textos de
pintadas, las siglas de izquierda superan en más del doble a las de derecha: la izquierda firma el 50% de sus
pintadas mientras que la derecha firma el 20%, la izquierda utiliza un lenguaje más redundante y la derecha más variado, la derecha escribe las frases un 25% más largas que la izquierda; un 30% de palabras son comunes a la izquierda y a la derecha.
«Tanto la izquierda como la derecha han presionado al Gobierno en el mismo sitio: las paredes. La derecha empezó a pintar para quitar espacio a la izquierda, pero al sentirse desplazada necesitó también el medio como vehículo. Un aspecto interesante es que al agotarse el espacio mural se han inventado otros soportes alternativos, como bancos, señales de tráfico, papeleras e incluso el asfalto las aceras. Los centros demográficos claves en
pintadas coinciden con las zonas conflictivas. Madrid ostenta todo un récord mundial».
La imaginación ácrataLos textos de origen contracultural, ácrata o anarquista, ocupan un lugar destacado en los
muros del posfiranquismo. «Aunque tienen como referencia inevitable el
mayo francés, han llevado a un verdadero renacimiento contraculturál pleno de imaginación creadora. Se ha producido una especie de liberación del anarquismo individual de gran fuerza creadora, sobre todo en las universidades. Un caso peculiar es el barrio del Carmen, de Valencia, de origen artesanal, donde se ha instalado ahora la juventud y ha producido las
pintadas más imaginativas».
En este tipo de textos, la acracia ha escrito:
Al orgasmo general,
Estamos entre la televisión y la pared,
Disuelve tu cuerpo represivo,
A la juerga general,
Más follar y menos trabajar,
Haced el amor sobre los bancos,
El placer al poder,
King Kong murió por nuestros pecados.
La producción de
pintadas sigue el ritmo y la intensidad de los acontecimientos políticos. También la forma de expresión se transforma en las sucesivas etapas de la dialéctica política. En las últimas semanas han proliferado en Madrid, la colocación de carteles, a imitación de los
dazibaos chinos. Con este medio se han
explicado los sucesos terroristas de Madrid, la legalización de los partidos políticos. la situación en China Popular y el primer aniversario de la República Arabe Democrática Saharaui.
«Ante la proximidad democrática -dice. Pedro Sempere-, los partidos políticos tienen como meta prescindir de las
pintadas y utilizar otros medios, como carteles, discos y la prensa de partido, como medio ideal. La
pintada connota la ilegalidad y la clandestinidad. De todas formas, tardarán mucho tiempo en desaparecer las
pintadas, por su inercia poderosa como medio alternativo, y las seguirán utilizando los orupos marginados».
Los muros del posfranquismo viene a ser la primera aproximación teórica a la pintada; «un medio alternativo. anónimo, gratuito, perdurable. utilizado por individuos o grupos como una forma de comunicación o de protesta».