Introducción
En Wikipedia se escribió: Jan Wacław Majaiski (o Machajski) (Busko-Zdrój, 1866 – Moscú, 1926), también conocido por el seudónimo A. Wolski, fue un pensador y revolucionario anarquista polaco.
Vida
Hijo de un oficial polaco pobre, Majaiski se sintió atraído brevemente por el nacionalismo polaco como estudiante, pero lo abandonó por el internacionalismo y el socialismo. Fue arrestado y deportado a Siberia en 1892, donde comenzó a desarrollar su crítica del revisionismo marxista en el socialismo alemán y ruso. Sus ideas fueron tomadas por la Conspiración de los Trabajadores, grupo que estuvo activo en Odessa en 1906, pero que siguió activo fuera del imperio ruso un año después.
Su padre fallece poco después del nacimiento de Jan Waclaw, dejando la familia en la pobreza. Su madre dirige una pensión para los estudiantes del instituto de Kielce. Machajski entra en la Universidad de Varsovia después de haber acabado brillantemente su bachillerato. Estudia ciencias naturales y medicina. Pero la lucha contra el zarismo le atrae más. Es arrestado en 1891 por primera vez por haber introducido clandestinamente escritos revolucionarios, y pasa cuatro meses en la prisión de Cracovia.
A partir de 1891, pierde sus ilusiones sobre las motivaciones de los socialistas polacos: se convence de que no luchan contra el zarismo para liberar a la clase obrera sino únicamente para fundar un estado polaco independiente sin modificar la explotación existente. Machajski adopta entonces una posición internacionalista y se convierte en marxista dejando de lado sus estudios universitarios. En 1892 es arrestado tras una gran huelga en Lodz durante la cual había redactado un llamamiento a los obreros de Lodz para luchar contra el zar y los capitalistas. Pasa tres años en la cárcel de Cracovia antes de ser deportado durante cinco años a Siberia. Es allí que junto a otros exiliados perfecciona su conocimiento de las doctrinas socialistas.
Es en el contexto del fin del siglo XIX y de principios del siglo XX, cuando los éxitos de la socialdemocracia alemana servían de modelo a los partidos y organizaciones socialistas rusas, cuando se publican los escritos de Machajski, justo cuando la influencia de Marx, Engels o de su sucesor Kautsky está en su apogeo.
Machajski tras someter la socialdemocracia alemana a una profunda crítica desde un punto de vista marxista revolucionario, dirige su crítica marxista contra los marxistas rusos, el marxismo, el propio Marx y el socialismo en general. Su conclusión, a la vez extrema y paradójica, basada sobre una reflexión teórica pormenorizada y después de haber frecuentado durante mucho tiempo el entorno de los revolucionarios rusos, es que el socialismo no sería más que la ideología de intelectuales que se aprovechan de la posición central que ocupan en la sociedad capitalista (gestión de la economía, control de la producción, monopolio de los conocimientos) para erigirse en nueva clase dominante: «El socialismo del s. XIX no es, como lo afirman sus creyentes, un ataque contra los fundamentos del régimen de despotismo que existe desde hace siglos bajo la forma de toda sociedad civilizada, vale decir, el Estado. Es nada más que el ataque a una forma de ese despotismo: la dominación de los capitalistas. Incluso en caso de victoria, este socialismo no suprimirá el pillaje de siglos, eliminará únicamente la propiedad privada de los medios materiales de producción, la tierra y las fábricas. No suprimiría más que la explotación capitalista. Por la sola supresión de los capitalistas privados, la clase obrera moderna, los esclavos contemporáneos no dejan de ser esclavos condenados a un trabajo manual durante toda su vida; en consecuencia, la plusvalía nacional creada por ellos no desaparece sino que pasa a través de las manos del Estado democrático, y se constituye como fondos de sostén para la existencia parasitaria de todos los pícaros, de toda la sociedad burguesa».
La experiencia histórica habría demostrado la exactitud de los análisis de Machajvski que son útiles para comprender el fracaso del proyecto "socialista" de emancipación de la clase obrera. Como lo explica en El trabajador intelectual: «Toda Rusia sabe ahora que el socialismo revolucionario, ilustrado por la ciencia "proletaria" e infalible de los marxistas, es el criado más seguro y fiel de la burguesía».
Bibliografía compilada (fuente)
Ensayo